“Pepita Campos tenía 18 meses cuando fue empujada accidentalmente dejando sus manitas sumergidas en el brasero de picón que calentaba la estancia. Las quemaduras las dejaron deformes para siempre. Los niños de la calle la llamaban “la manca”, pero a ella no le importaba, porque aquellos extraños apéndices superaron todas las limitaciones de su estructura para aprender a valerse por sí mismas; y a los 9 años ya fue contratada como aprendiz en un taller de costura, haciendo de ello su profesión. Así sus manos se convirtieron en un apreciado tesoro con el que ella aprendió a expresarse y cuando habla las agita graciosamente, como si quisiera echarlas a volar. Pepita Campos es mi madre, y sus manos parecen pájaros en el aire”.
Así comienza el primer single de «Las manos de mi madre», este nuevo y tercer disco de Babel Ruiz. Una apuesta musical de la cantante ceutí, dedicada a su propia madre, como homenaje a la raíz. Cuba, Argentina, Marruecos, Senegal, España, Brasil, Portugal…
Algunos de los temas pertenecen a la tradición de estos países, arreglados y producidos por ella misma y cantados en el idioma original, junto a composiciones de su autoría.